El tiempo sin ti.

¿Sabes que pasó cuando me separaste de ti?
El primer día fue un “se fuerte y ya llorarás cuando llegues a casa”, el segundo fue cuando no tenía ni puta idea de como seguía echando lágrimas si ya me había llorado la noche entera queriendo entender el porqué. El tercer día fue cuando comencé a notar más tu ausencia, empecé a extrañarte un poco más y una parte de mi sostenía que te pasaría lo mismo y que eso te haría volver. El cuarto día esperé un mensaje, un simple “podemos hablar” que daría comienzo a algo mejor. Pero ya pasaron meses y ese mensaje aún no ha llegado y dudo que mandes un “te extraño” o “la he cagado” y al escribir esto me doy cuenta que nada dura el tiempo que uno espera, aquello que prometes, aquello que juramos que nunca acabaría, acabó.

El primer mes fue cuando entendí que todo lo que simplemente fuimos no iba a volver, empecé a dar un paso, y otro, y otro hasta poder afrontar el estar sin ti, pero no faltaban noches en el que extrañaba tus abrazos, tus besos, tus caricias, y aquella cara que creía conocer, también la extraño.
Siempre necesité tiempo para mi mismo, pero nunca me di cuenta que te necesitaba cuando lloraba; y es que simplemente con tu sonrisa controlabas mis días, calmabas mis demonios y si el motivo era yo, valía mas que nada en el mundo.
Hoy ya puedo decir que estoy mejor, pero siempre al terminar el día, me acuerdo de ti, eso no me permite conocer a nadie que me llene y me complete de la forma que solo tú lo hacías, y da tanta bronca que sea así, que ya ni me recuerdes, que tu si pudiste seguir adelante, empezar una nueva relación y dejarme acá hecho mierda.

No digo que esta mal, porque cada uno debe seguir por su lado, pero me olvidaste tan rápido, te fuiste en un abrir y cerrar de ojos, llevándote todo.
Pero ahora soy yo el que no sabe donde ir cuando me siento solo, ni a quien pedirle ayuda cuando quiera tirarlo todo a la borda. Dirán que soy cobarde al no decirte todo lo que me consume por dentro y muero por soltar, pero es que nada va a cambiar, porque no quiero interrumpir, sé que eres feliz. Y solo me basta y conformo pensar en ese “algo” que algún día fuimos.
Porque pase lo que pase, sea cual sea el daño que me hayas hecho, como o con quien estés, yo siempre voy a estar verdadera y completamente enamorado de ti. Quizás con el tiempo nos veamos una vez más y podamos cambiar todo lo que hicimos mal, y no me importa que me llenen la cabeza diciendo que no vales la pena, porque si vales. Vales las lágrimas, las risas, la espera y aunque hayas roto una parte de mi, que me dolió hasta el alma, gracias; porque de todas formas estamos hechos para que nos rompan el corazón y un gusto que lo hayas roto tu, así uno aprende a levantarse y seguir caminando por su propio pie.

Besos, con amor.                                                                                    Hazel B.

Un día como cualquier otro…

Y quizás cuando tú puedas, y te dignes, y me entiendas, cuando me escuches y me intentes comprender, cuando te canses de irte y decidas quedarte, cuando estés en cuerpo y alma y tus acciones le sean fieles a tus palabras, quizás cuando me veas, cuando me mires, cuando me prestes atención, cuando te canses de los amores de un rato, cuando entiendas lo mucho que hice por ti, cuando descubras que me quieres más que esto, cuando estés dispuesta a hacernos funcionar, a poner tu 100%, a dejar de darme por sentado y empezarme a valorar. Quizás, yo ya no quiera. Quizás ya hace rato haya dejado de querer. Quizás ya esté mirando hacia otro lado, hacia otros rostros. Quizás al fin comprenda que buscar donde no hay: es masoquismo, que el amor no se mendiga, que no te quería tanto como pensé, que solo me gustaba la imposibilidad de tenerte, que quería que me quisieras. Que quería que te dejaras querer. O quizás, te reciba con un cálido abrazo, de esos que anuncian que te esperaban hace rato. Quizás siga siendo el mismo iluso que juega a tenerte cuando mi corazón sabe bien que no es así, que solo tiene alguna migaja, alguna sobra, alguna parte, y se está conformando. Pero aún así me aferro a la esperanza que me dice, ya cansado… que un día de estos, uno como cualquier otro, me voy a querer tanto como para dejarte de querer.

Escribiéndote de nuevo.

Hace mucho que no sé de ti. No sé que es de tu vida, si estás feliz, si ya tienes a alguien o si sigues siendo esa chica solitaria.

Fuiste parte de mi vida, una pieza fundamental; ahora un episodio de mi pasado que repetiría las veces posibles para volverte a conocer.

Aquí estoy, escribiéndote, pensándote de nuevo, esperando que estés bien y que estés logrando tus sueños ya que el destino no te dejo cumplirlos a mi lado.

Hace un año emprendíamos un pequeño viaje, el primero, juntos; bonito e inolvidable… y hoy sólo me quedan los recuerdos, las sonrisas, las pláticas y todo aquello divertido que vivimos juntos.

Me ha sido muy difícil poder desprenderme de todo lo que dejaste en mí, y como no recordarte si en los momentos de soledad siempre nos teníamos el uno para el otro, pero voy a estar bien, cada día voy mejorando y suponiendo que tu vida se ha vuelto mucho mejor desde que deje de ser un obstáculo para ti.

Aún cuándo apareces en mis sueños y en mi mente,  con las esperanza de que algún día la vida te mostrará que fuimos hechos el uno para el otro, por ahora me quedo con el simple hecho de haberte conocido.

Y aunque el destino no nos quiso juntos, siempre te voy a desear lo mejor para ti y las personas que te rodean en este momento de tu vida y las que vengan ya que son parte de tu felicidad, así como tu lo fuiste alguna vez para mí.

Te deseo una bonita navidad entre letras, un feliz año nuevo entre estrofas y un buen cierre de ciclo entre nosotros.

PD: Te amo para siempre, NELA.

Con amor; Haz.

En mis sueños.

Volvía a verte.
Esta vez sin temores, sin miedos, sin excusas.
Te veía y no podía creerlo, después de tanto aparecías y volvías a moverme el mundo, los sentimientos, los pensamientos.
Volvías tú o volvía yo, no lo sé.
Pero coincidíamos. Coincidíamos una vez más cariño.
Tú de nuevo soltera y disponible, y yo feliz y tranquilo y alterado y alegre y hecho un verdadero caos de emociones.
Volvía y te veía y pensaba que no podría amar a nadie como te amé a ti.
Tú. Mi  amor, inevitable, intenso, prohibido y fantástico.
La vida nos volvía a una segunda oportunidad, o al menos al intento de una.
Esta vez te tenía, para mí. Y no hubo nada más doloroso, que después de todo, hubiera que despertar.
Y darme cuenta de que no hubo segundas oportunidades, ni siquiera primera. Que todo tan solo había sido un sueño.
Y que solo me quedara de consuelo que el hecho de que lo soñara un 7 de mes no fuera coincidencia, que no podía serlo después de tanto tiempo de ya no soñarte, me quedé con el deseo de que significara que por lo menos tú también lo sentías, que no fuera solo yo quien experimentara todo aquello de nuevo.
A pesar de todo, y del sueño y de la vida.
Aún me queda el deseo de haberte dejado una gran explicación.
Y no sabes cómo lo siento.

Perfectamente imperfecto.

No te busqué como debía ni tampoco te esperaba así de indescriptible. Escribí por muchos inviernos y unos cuantos otoños sobre un amor en fe, uno «perfectamente imperfecto», que al calcarlo a la materialidad era más sueño que real. Quería creer con todo mi corazón que un amor así podía existir en toda esta oscuridad, pero el miedo nubla la esperanza y hace sucumbir hasta al más fiel soñador. Y es que no sabía a ciencia cierta que un amor mortal podía ser y estar, así de completo. No es excusa, bien lo sé, pues pude seguir embriagándome de locura y certidumbre, clamarle al viento hasta que éste me dijera tu nombre y preguntarle al mundo entero sobre ti hasta encontrarte y tenerte entre mis brazos.
Pero el destino y la predestinación disfrazada de casualidad y cotidianidad, te llevaron a mí, y junto con tu mirada, se aseguraron de entrar en mi alma en el momento justo e indicado; en ese instante donde mi soledad estaba lista para ya no compartirse con nadie más, donde el amanecer de mi tiempo se entrelazó con el otoño de tus años, haciendo el instante justo para amar. Y en menos de lo que el tiempo se convierte en recuerdo, te convertiste en esa necesidad latente en mí; necesitad de tu cercanía, de escuchar tu voz, de ver tu mirada, de sentir tus caricias y de compartir cada segundo de mi vida contigo.
Pero si quedaba duda alguna, llegó ese beso que aclaró lo que ya se hacia evidente en mi interior. Comprendí en segundos que mi alma fue hecha para encajar directamente en la tuya, que mis brazos fueron creados para darle calor a tu cuerpo, que mis labios fueron diseñados para robarte el aliento y que mi corazón no estaría completo sin tu dulce y delicado amor. Así fue como descubrí que el amor era verdad y no una simple historia de cuna. Que el amor tenia un nombre y que éste se pronunciaba como el tuyo. Que los finales felices no existen, pero que el amor que se regala tras cada amanecer, una y otra vez es toda una real. Que los segundo sí se vuelven eternidad y que la vida sí es vida cuando se ama con tanta intensidad.

Ahora bien lo sé, que tú mi amor, eres mi hermosa y necesaria causalidad, mi razón de romance y de ser completamente feliz.

Es por ello que siempre diré que soy enteramente tuyo, pues siempre fue así, aún cuando ya no creía en ti.

TE EXTRAÑO, MI ELEMENTO VITAL.

Cada día que pasa me voy acostumbrando al hecho que estés sinmigo, y el extrañarte me invade, me carcome, me purga la existencia… cómo me gustaría poder regresar el tiempo, los momentos que creamos juntos, todo aquello que alguna vez nos dijimos, ese amorío que compartimos.

Mi elemento vital… como te extraño, como te pienso, como te sueño, si supieras como cada noche me invaden las lágrimas e imploran tu regreso, y a pesar de eso, ahora, amo tu vitalidad a distancia, confundida y compartida, explorando nuevos elementos, qué… quizá, alguno de ellos pueda ser tan vital como lo fuiste para mí.

.- Letras de Cristal – Hazel Ballesteros.

tumblr_n4x6raww5x1qknyrjo1_500

 

Puede ser…

 

Puede ser que mis palabras ya no te iluminen la sonrisa como lo hacían tiempo atrás, puede ser que mis manías te aburran o que mi forma de hablarte o hacerte reír ya no te hagan vibrar. Puede ser que todos los momentos que pasamos juntos los estés olvidando con el paso del tiempo, no te culpo, entiendo completamente que el haber caído simultáneamente te haya roto las alas que compartías conmigo.

Puede ser que cada momento que nos hicimos falta no se puedan recuperar, puede ser que mis ganas de besarte incomoden o lleguen a ser molestos. Puede ser que en ocasiones mantengamos ese orgullo por no saber decir; te necesito, me haces falta, te quiero, te extraño.

Puede ser que ahora nos sea difícil  recuperar lo que una vez fuimos, puede ser que los miedos nos invadan para siempre. Puede ser… que el querer estar juntos nos lleve aún un largo tiempo… y sin embargo conservo las esperanzas de que si… «Puede ser»

CUANDO PUDE VER CORONARTE DIOSA DEL OLIMPO.

Guardo una foto, una de las más preciadas para mi, dónde pude ver coronarte Diosa del Olimpo, coronarte arte inmaculado ante los mortales tratando de ser dioses, coronarte música divina ante los cantos de pegasos, coronarte danza ancestral ante los caminares de Hera.

Te vi coronarte Diosa siendo tú… con esas imperfecciones que tanto amaba, tu risa alborotada, tu sonrisa inmaculada, tus ojos achinados, tus labios sonrosados. El estupor en tu mirada al contemplar la luna, tu poder de activar las mareas de mi cuerpo ante tu piel, esculpida sobre espejos y vidrios hechas mansiones, con lunares en tu cuerpo montados por pegasos, tus manos finas que encajaban perfectas en las de este simple mortal.

Provocando que lo más imperceptible de la vida a tu lado haya sido lo más grandioso vivido por un efímero mortal como yo, esto pasa cuándo vez a la mujer que amas en un concierto de su grupo favorito siendo tu, su canción pasajera.

Escrito por Hazel Ballesteros

Twitter:  @haz_ballesteros

IG: Hazel Ballesteros

3ma876iQ

Me importas tanto…

Me importas tanto mujer que prefiero no insinuarme, prefiero no verte para no que no te llenes de mi, prefiero no escribirte, prefiero ocultar todo lo que siento por vos, prefiero aguantar esas excitantes ganas de llenarte de besos, de abrazarte, de hacer el amor contigo.

Prefiero que conozcas otros amores, salgas con tus amigos, viajes por el mundo, disfrutes de la soledad, así como yo.

Te quiero libre de pensamiento mío, loca y despeinada, apurada y aventada, te prefiero absuelta de mi amor, porque este amor que tengo por vos, no es algo simple de digerir, este amor va más allá de un largo periodo de noviazgo, este amor te quiere en los últimos días de mi vida, es mis viajes largos y cortos, en mis proyectos de vida, este amor no guarda rencores, este amor te prefiere soñando juntos en la misma almohada, en la misma cama, en la misma casa, este amor es paciente, te quiere en mis días de súper mercado, en mis días de lluvia y tazas de café, en mis noches de melancolía, este amor te va a esperar para volverte a ver, para construir una vida, una familia, un amor verdadero.

Oye ven…

Oye ven… escápate conmigo, vamos a besarnos por calles desconocidas que se llenarán de nuestra historia, vamos a visitar lugares comunes  que con tu compañía se vuelven extraordinarios, bebamos un buen vino… sigamos riendo de nuestras manías, toma mi mano de nuevo y déjate amar por este mortal, demostremos al mundo lo que es el amor de verdad. Caigamos y volvamos a levantarnos, aprendiendo juntos, aceptándonos como somos, siendo felices siendo imperfectos.

esta-practica-144